Un cuerpo en estado de descomposición fue encontrado por habitantes en la comunidad La Sirena del municipio de Estelí. Las autoridades policiales investigan el caso para determinar si hubo mano criminal.
Las aves de rapiña ya estaban devorando el cuerpo sin vida de Leoncio Calero Leiva, de 25 años de edad. Este hombre tenía cuatro días de estar desaparecido y nadie lo podía encontrar.
«Siempre paso por aquí buscando mis vacas, ya que yo soy el dueño de esta propiedad, y vi que los zopilotes estaban encima de él y lo arrastraron hacia abajo. En ese momento llamé a la Policía»; manifestó Juan Talavera, testigo.

Leiva, desde muy joven, inhalaba pega y consumía licor. En horas de la noche llegó a la vivienda de un familiar. Dina Hernández, en varias ocasiones, le dijo que no se fuera, pero no hizo caso.
Zopilotes alertan sobre cuerpo abandonado en barranco de Estelí
«En esta comunidad tiene una hija, y a veces la miraba. Pero caminaba con un tarro de pega, inhalando, y se ponía perdido, hasta el punto que no reconocía a nadie»; relató Hernández.
«Le rogué que no se fuera, pero no le importó. Ya hoy en horas de la tarde me avisaron que estaba muerto. Me da mucha tristeza porque conozco a su mamá y sé que esto le va a doler mucho»; recalcó la testigo.

El cuerpo fue encontrado a la orilla de una poza en el sector de Santa Rosa, comunidad La Sirena, al norte de Estelí. Se presume que Leoncio se precipitó desde un barranco de aproximadamente 30 metros de altura.
Las autoridades policiales y la médica forense se presentaron al sitio y realizaron las investigaciones para determinar si alguien está involucrado en la muerte de este joven.

 
		 
			

















