Diriamba se vistió de gala este fin de semana para conmemorar el 131 aniversario de su elevación de villa a ciudad, con un evento lleno de cultura, gastronomía, bailes y tradiciones que resaltan la identidad y el patrimonio de la Cuna del Güegüense.
La ciudad, reconocida también como cuna del hipismo y del fútbol, recibió a cientos de familias que disfrutaron de la gastronomía local, destacando el tradicional “picadillo”. Los más pequeños fueron protagonistas de una tarde recreativa con payasos, globoflexia y pinta caritas, enmarcando un ambiente familiar y festivo.
El Festival de Bandas Rítmicas recorrió las principales calles y avenidas, culminando con un acto de gala cultural, en el que se entregaron reconocimientos a personas destacadas en la cultura y el deporte. Además, la Escuela de Danza ofreció presentaciones que celebraron la riqueza artística de la ciudad.
El pastel más grande de la ciudad
Como parte de la celebración, se presentó el pastel más grande de la ciudad, representando un paseo de bailes tradicionales, y la jornada finalizó con una gran fiesta popular, amenizada por la agrupación Fusión 4 y acompañada de un espectáculo de juegos pirotécnicos para el disfrute de las familias.
Con estas actividades, Diriamba reafirma su compromiso con la preservación cultural y la recreación familiar, destacando su riqueza histórica y artística que atrae a visitantes y residentes por igual.


 
		 
			

















