La Asamblea Nacional aprobó reformas parciales al artículo 125 de la Constitución Política de Nicaragua y a la Ley No. 872, que regula la organización y funciones de la Policía Nacional.
Estas disposiciones establecen que la jefatura de las fuerzas policiales será ejercida por dos jefes, nombrados por la Co-Presidencia de la República por un periodo de seis años.
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El director de la Policía Nacional, Primer Comisionado Francisco Díaz Madriz; explicó que esta decisión busca fortalecer y reforzar la labor policial cotidiana en los 15 departamentos; los 153 municipios y las dos regiones autónomas del Caribe Norte y Sur.
“La misión de la Policía Nacional en el marco constitucional es prevenir e investigar delitos y accidentes de tránsito, enfrentar la delincuencia común y el crimen organizado, y proteger la paz, la vida, la integridad física de las personas y sus bienes”; señaló Díaz.
Fortalecimiento de la institución del orden de Nicaragua
Además, el jefe policial de Nicaragua agregó que entre las prioridades institucionales también se encuentran la lucha contra el terrorismo, el tráfico de drogas y armas, los ciberdelitos y el lavado de activos. “Con esta reforma se permitirá una Policía Nacional más efectiva y eficiente; también consolidando su presencia y acción en todo el territorio nacional”, afirmó.
Igualmente, indicó que es una decisión acertada de la jefatura suprema. «Porque dos jefes de las fuerzas policiales vienen a fortalecer el trabajo policial»; aseguró Díaz.
«La Policía Nacional, por misión constitucional, debe prevenir e investigar los delitos y accidentes, atender las faltas penales, y mejorar el enfrentamiento a la delincuencia común y al crimen organizado»; continuó.
«¿Por qué dos jefes de fuerzas policiales? Esta decisión acertada de nuestra jefatura suprema, el Comandante Daniel y la Compañera Rosario, viene a fortalecer y reforzar el trabajo de la Policía Nacional, asegurando una labor policial coordinada.«
Protección de la vida
«Además de fortalecer y proteger la paz, nuestra labor garantiza la protección de la vida, la integridad física de las personas y sus bienes, así como los bienes de las instituciones. La prioridad es nuestro pueblo y las familias nicaragüenses: proteger la paz y la seguridad»; comentó.
«Con esta medida, nuestra Policía será más eficiente y efectiva en la prevención y en el enfrentamiento al crimen organizado, especialmente en los delitos de terrorismo, tráfico de drogas, tráfico de armas y lavado de activos»; agregó el jefe policial de Nicaragua.
«Esta decisión acertada viene a fortalecer, consolidar y reforzar el trabajo de la Policía Nacional»; concluyó.
