Con una ofrenda floral y palabras llenas de sentimiento, se conmemoraron 56 años del tránsito a la inmortalidad del comandante Julio Buitrago Urroz, padre de la resistencia urbana y figura clave en la historia revolucionaria de Nicaragua.
El homenaje tuvo lugar en el sitio que guarda su legado, la Casa Museo Julio Buitrago, ubicada en el Distrito II de Managua. En este espacio cargado de simbolismo, miembros históricos de la Revolución y representantes institucionales se reunieron para destacar el ejemplo de quien dio su vida por amor a la patria.
Julio Buitrago fue un joven decidido, firme en sus ideales y comprometido con el pueblo. A 56 años de su caída en combate, su nombre sigue siendo sinónimo de valentía, entrega y dignidad.
Durante el acto, la viceministra Erika Espinoza expresó que su legado está presente en cada paso que da el pueblo hacia una Nicaragua mejor.

Homenaje a Julio Buitrago
“Julio Buitrago no ha muerto. Está vivo en cada acción, en las escuelas, en la merienda escolar, en los barrios y en las niñas y niños de nuestra tierra valiente. Seguimos accionando hacia el porvenir y ganando nuevas victorias»; dijo Espinoza.
La actividad también sirvió para reafirmar el valor de la memoria histórica como parte fundamental en la formación de nuevas generaciones; impulsando una cultura de paz, justicia y respeto.

“Reafirmamos y confirmamos, como servidores y servidoras públicas de esta Nicaragua bendita y siempre libre, nuestro compromiso a seguir luchando, a seguir siendo victoriosos en esta Nicaragua y seguir honrando el legado de nuestros héroes y mártires. Nuestro comandante Julio Buitrago Urroz dice presente”; detalló Eliza Montes, militante sandinista.
A través de este acto simbólico, se recordó al joven combatiente que ofrendó su vida a los 25 años. Su ejemplo permanece vivo en el corazón de quienes creen en la libertad, la unidad y el porvenir de Nicaragua.
 
		 
			

















