FBI rastrea y arresta a joven por amenaza falsa a crucero Carnival

Foto:Joven admite haber enviado amenaza por enojo/Cortesía
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Lo que comenzó como un ataque de celos y frustración terminó en una sentencia de prisión federal. Joshua Lowe, un joven de 19 años de Míchigan, fue condenado a ocho meses tras las rejas luego de enviar una amenaza de bomba falsa a un crucero de la línea Carnival, donde viajaban su novia y la familia de ella. ¿La razón? Lo habían dejado en casa para cuidar a las mascotas.

El insólito hecho ocurrió en enero de 2024. Después de que el barco Carnival Sunrise zarpó desde Miami rumbo al Caribe, la empresa recibió un inquietante correo electrónico:
«Hey, creo que alguien podría tener una bomba en su crucero Sunrise».

La amenaza activó un operativo de seguridad de gran escala. Más de mil camarotes fueron inspeccionados a fondo, y tanto la Guardia Costera de EE. UU. como las autoridades de Jamaica fueron alertadas. Finalmente, se determinó que no existía ningún riesgo real.

La investigación del FBI logró rastrear la dirección del correo hasta Lowe, quien en ese momento vivía con la familia de su novia. Durante los interrogatorios, el joven confesó que había enviado el mensaje por enojo y despecho, al sentirse excluido del viaje familiar.

Foto:Joven admite haber enviado amenaza por enojo/Cortesía
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Joven admite haber enviado amenaza por enojo

En la audiencia celebrada en Kalamazoo, Lowe se declaró culpable y expresó su arrepentimiento en una carta dirigida al juez Paul Maloney:

Todo esto es culpa mía y asumo toda la responsabilidad. Fue un error enorme del que me arrepiento profundamente”.

Además de la pena de prisión, se le ordenó pagar una restitución económica por los costos generados durante la operación de seguridad.

Las autoridades federales recordaron que las amenazas falsas no son inofensivas. El fiscal Nils Kessler recalcó que este tipo de incidentes movilizan recursos importantes, incluso si resultan ser falsas alarmas. Por su parte, el FBI fue enfático:

“Las amenazas de bomba no son una broma. Este tipo de acciones desvían recursos críticos y siembran temor innecesario”; declaró el agente especial Cheyvoryea Gibson.

El caso de Joshua Lowe es un ejemplo claro de cómo una decisión impulsiva puede desencadenar consecuencias legales reales y duraderas.