Las autoridades de Vietnam confirmaron este miércoles que el tifón Bualoi se ha convertido en la tormenta más letal del año para el país, dejando un saldo de 19 personas fallecidas y 21 desaparecidas.
Además, se reportaron 88 heridos y más de 105.000 viviendas dañadas en al menos quince provincias del centro y norte de Vietnam, informó el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente.
La provincia más afectada fue Ninh Binh, donde un tornado generado por el tifón destruyó una decena de casas y provocó la muerte de nueve personas. Otras víctimas perdieron la vida al ser arrastradas por corrientes de agua o debido a la caída de árboles, según medios locales.
Bualoi continúa generando fuertes lluvias y ráfagas de viento de hasta 120 km/h, lo que aumenta el riesgo de inundaciones y deslizamientos de tierra, advirtió el Centro Nacional de Pronóstico Hidrometeorológico.
Vietnam enfrenta el fuerte embate del tifón Bualoi, que tocó tierra en la madrugada de este lunes 29 de septiembre, trayendo intensas lluvias y vientos peligrosos en varias regiones del país. Las autoridades han activado protocolos de emergencia y hacen un llamado a la población… pic.twitter.com/2TMW8QzIQq
— teleSUR TV (@teleSURtv) September 29, 2025
Tifón Bualoi deja 19 muertos en Vietnam
Ante la emergencia, el gobierno vietnamita ha desplegado fuerzas militares para apoyar las labores de rescate y reparación de viviendas e infraestructuras afectadas.
El tifón Bualoi había cruzado previamente Laos y se dirige hacia el noreste de Myanmar, tras dejar al menos 14 víctimas mortales en Filipinas la semana pasada. Este fenómeno evidencia la vulnerabilidad de Vietnam ante los desastres naturales.
En lo que va de 2025, el país ya ha enfrentado múltiples tormentas devastadoras. En agosto, el tifón Kajiki causó siete muertes y más de treinta heridos, mientras que en septiembre, el ciclón Yagi; considerado el más destructivo en tres décadas, provocó alrededor de 300 fallecimientos.
Las autoridades continúan monitoreando el avance de Bualoi y llaman a la población a extremar precauciones; especialmente en zonas bajas y áreas montañosas donde los deslizamientos y las inundaciones representan un riesgo crítico para la vida de las personas.
La prioridad del gobierno sigue siendo rescatar a los desaparecidos y mitigar los daños provocados por el tifón en la infraestructura y las viviendas afectadas.

 
		 
			

















