La inesperada muerte de Hulk Hogan, leyenda de la lucha libre profesional, ha conmocionado al mundo del entretenimiento. El exluchador, cuyo nombre real era Terry Gene Bollea, falleció el 24 de julio de 2025 a los 71 años, tras sufrir un paro cardíaco en su residencia en Clearwater, Florida.
Sin embargo, un reciente reporte del Departamento de Policía de Clearwater ha abierto una nueva línea de investigación; la posibilidad de que su muerte haya sido resultado de una negligencia médica.
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Según el informe, un terapeuta ocupacional estaba presente cuando Hogan dejó de respirar, y fue su esposa, Sky Daily, quien llamó al 911.
A pesar de los esfuerzos de reanimación por parte de los servicios de emergencia, Hogan fue declarado muerto en el Hospital Morton Plant a las 11:17 a.m.
La esposa de Hulk Hogan rompe el silencio
El terapeuta indicó que el exluchador habría sufrido complicaciones tras una operación reciente, donde posiblemente se dañó el nervio frénico, vital para la respiración.
Además, el informe forense reveló que Hogan padecía leucemia linfocítica crónica y fibrilación auricular, condiciones que agravaron su estado de salud. Su hija, Brooke Hogan, solicitó una autopsia para esclarecer los hechos.
Con más de 25 cirugías en la última década y una salud cada vez más frágil, la figura de Hogan vivió sus últimos días entre tratamientos intensivos y dependencia de oxígeno. A pesar de esto, su esposa aseguraba públicamente que su condición era estable.
Hogan fue seis veces campeón mundial de la WWE y un ícono del entretenimiento deportivo, con incursiones en el cine, la televisión y los negocios. La investigación sobre su fallecimiento sigue abierta, mientras el mundo recuerda a una leyenda que trascendió el ring.
