El último concierto de Black Sabbath en Birmingham, Inglaterra, no solo fue histórico por marcar el adiós definitivo de una de las bandas más icónicas del heavy metal, sino también por un momento inesperado y profundamente emotivo en el backstage: Kelly Osbourne se comprometió con Sid Wilson, miembro de la banda Slipknot y padre de su hijo.
Mientras Ozzy Osbourne, el legendario «Príncipe de las tinieblas», cerraba un capítulo de su carrera musical, su hija Kelly iniciaba uno nuevo en su vida personal. Rodeada de su familia y amigos, fue sorprendida por Sid con una propuesta de matrimonio que hizo reír y llorar a todos los presentes.
El momento fue capturado en video, donde se puede escuchar a Sid decir: “Kelly, sabes que te amo más que a nada en el mundo”, antes de arrodillarse. En medio del silencio de expectativa, Ozzy rompió la tensión con humor gritando: “¡Vete al carajo, no vas a casarte con mi hija!”, desatando carcajadas de Sharon, Jack y todos los asistentes.
Tras la broma, Sid continuó su discurso: “No hay nada que me haría más feliz que pasar el resto de mi vida contigo”, y le colocó el anillo a Kelly, sellando su compromiso.

Ozzy Osbourne reacciona al compromiso de su hija Kelly
El anillo, diseñado por Mouawad, está inspirado en el apodo de Kelly, “Honeybee”, y está valorado en 110 mil dólares. Hecho en oro amarillo de 18 quilates, tiene diamantes blancos y amarillos, citrinos y un diamante redondo central que simboliza el amor eterno.
El concierto de despedida no solo marcó el fin de una era para Black Sabbath; sino el inicio de un nuevo capítulo para la familia Osbourne, lleno de amor, legado y nuevas memorias.
 
		 
			

















