Un hombre resultó herido de gravedad tras sufrir el ataque de un oso mientras recolectaba setas en un bosque del condado rumano de Harghita. Según informes oficiales, el incidente ocurrió en una zona donde no se registraban ataques de estos animales desde hacía años.
La víctima recibió múltiples mordeduras y arañazos en las manos, la pierna derecha y el rostro. Fue trasladada de urgencia al hospital de Miercurea Ciuc, donde su estado fue reportado como estable por el servicio de ambulancias regional.
La intervención de otros recolectores de setas, quienes lograron espantar al oso usando el ruido de sus cubetas, fue clave para evitar una tragedia. A pesar de la rápida presencia de gendarmes, cazadores y veterinarios, el animal responsable no pudo ser localizado.
Este incidente reaviva la polémica sobre la superpoblación de osos pardos en la región. Hace poco más de un mes, otro ataque letal cobró la vida de una joven de 19 años cerca de Brașov. A raíz de ello, el Parlamento rumano autorizó el sacrificio de hasta 426 osos pardos hasta 2025 para mitigar los riesgos a la población. El primer ministro Marcel Ciolacu afirmó que “la vida humana es más importante que cualquier otra cosa”, sin embargo, aclaró que las cacerías solo se realizarán en áreas con alta densidad de osos.
Ataque de oso deja hombre gravemente herido en Harghita, EE.UU.
Rumanía alberga cerca del 40 % de la población total de osos pardos de Europa —unos 7 200 ejemplares—, un incremento atribuido a programas de conservación europeos. Pero esta recuperación ha provocado, a su vez, un aumento de incursiones en zonas pobladas. En los últimos 20 años, se han registrado 26 muertes y más de 270 heridos por ataques de osos en el país.
En marzo de 2024, el gobierno rumano solicitó a la Comisión Europea una reevaluación del estatus de protección de la especie, en busca de medidas que permitan equilibrar conservación y seguridad ciudadana.
