Por más de 20 años, un hombre ha estudiado los diferentes tipos de hongos, pero ahora los ha convertido en uno de los platillos favoritos en las familias de Estelí.
Por naturaleza, el ser humano siempre ha buscado la manera de sobrevivir; los primeros alimentos se los brindó la madre tierra, y el hombre ha logrado aprovechar al máximo este buen gesto.
Al norte de Nicaragua existe un lugar creado por las manos de Dios: es la comunidad La Garnacha, en el municipio de San Nicolás, Estelí. Así lo afirmó Fulbio Castillo, porque ha encontrado en estos campos una variedad de hongos comestibles.
“La idea surgió cuando un amigo me dijo que eran ricos los hongos, entonces preparé varios con mi esposa, y tenían un sabor muy rico. Dependiendo de la temporada, algunos saben a carne de cerdo o pollo. Con el paso del tiempo, ya tengo buena experiencia en la cocina”, mencionó Fulbio.

¿Te imaginas hongos con sabor a cerdo y pollo? ¡Existen y están en Estelí!
Este hombre es micólogo y tiene años de estudiar de cerca cuáles son los tipos de hongos que pueden ser saludables. Pero él quiso llegar más allá y tuvo la iniciativa de elaborar diferentes platillos.
También dijo que, al principio, a los visitantes no les parecía la idea de comer hongos, pero cuando los veían en el plato preparados, con su salsa, aguacates, chile, su tomate, chiltoma y cebolla, ¡todo se lo comen!
En el tour gastronómico y científico que realiza a las familias se les explica en qué temporada estos hongos brotan de la tierra, ya que no se cultivan, y que son un complemento saludable para cualquier dieta.
De todo el país han visitado a Fulbio para conocer su pasión por los hongos y el arte en la cocina, para poder elaborarlos con ese toque exquisito que conquista cualquier paladar.



















