Este sábado 1 de noviembre, miles de personas se reunieron en las calles de Buenos Aires, Argentina, para participar en la 34ª Marcha del Orgullo LGBTIQ+; realizada bajo el lema “La verdadera libertad”.
La multitudinaria movilización tuvo lugar una semana después del triunfo del oficialismo en las elecciones legislativas, con una gran concentración en Plaza de Mayo y frente al Congreso Nacional, donde se hizo visible la consigna: “Frente al odio y la violencia; más orgullo y unidad”.
El evento fue convocado por la Comisión Organizadora de la Marcha del Orgullo – Línea Histórica, y contó con la participación de organismos de derechos humanos; representantes del colectivo LGBTIQ+, artistas y agrupaciones sociales.
En el escenario instalado en Plaza Congreso, se leyeron documentos, se rindieron homenajes y se expresaron mensajes de rechazo ante los recientes ataques y discursos de odio hacia la comunidad diversa; en una jornada marcada por el color, la reivindicación y la demanda de igualdad.

En horas del mediodía, la jornada estuvo marcada por diversas manifestaciones artísticas y conmemorativas; entre las que se destacó un acto en memoria de Diana Sacayán, al cumplirse una década de su asesinato, reconocido como travesticidio.
También se realizó un pañuelazo simbólico en defensa de la memoria, la verdad y la justicia, con la participación de referentes de organismos históricos como Madres de Plaza de Mayo – Línea Fundadora; Abuelas de Plaza de Mayo, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), H.I.J.O.S. Capital, Nietos, y la presencia de Taty Almeida.
Argentina marcha por la libertad y la diversidad
La marcha también se posicionó en rechazo a los Decretos de Necesidad y Urgencia 61 y 62/25, que según las organizaciones convocantes, «cercenan derechos conquistados, como el acceso a la salud de adolescentes trans y la identidad de género de personas privadas de libertad».

En ese contexto, la activista Florencia Guimaraes expresó que «es muy importante estar hoy acá, organizades, unides, ante tanto odio, ante la avanzada neofascista del gobierno de Javier Milei, Patricia Bullrich y sus aliados; que vienen a patearnos la cabeza a las personas LGTBI. Nosotras organizadamente les decimos acá estamos, como nos enseñaron Loahna, Diana y un montón de otras compañeras; en la trinchera y en la lucha«.
El contexto actual en Argentina ha generado preocupación entre activistas y organizaciones, quienes advierten que los discursos de odio se han intensificado; mientras el Gobierno ha desmantelado políticas públicas de diversidad, ha criminalizado a personas LGBTIQ+ y ha reducido derechos para las juventudes.


















