La noche del domingo 3 de agosto de 2025, la ciudad de Juigalpa celebró con orgullo la elección de Shiara Shianith Ruiz Chavarría como Reina de las Fiestas Tradicionales 2025, tras una jornada llena de emoción, colorido y fervor popular que reafirma el espíritu cultural del pueblo chontaleño.
Con 1 093 votos obtenidos por la barra blanca, Shiara se impuso como la gran favorita del público, superando a las otras dos candidatas: Alejandra Martínez, representante de la barra negra con 204 votos; y la señorita Emely García, de la barra roja, con 570 votos.
Originaria de Juigalpa, Shiara no solo conquistó una corona, sino también los corazones de su gente. Su carisma, compromiso con la cultura local y pasión por las tradiciones la convierten en una digna representante de estas fiestas tan arraigadas en el alma del pueblo.
“Agradezco a Dios, a la Virgencita de la Asunción, nuestra santa patrona, a nuestros patrocinadores y, sobre todo, al pueblo de Juigalpa por haberme permitido ser su Reina. Esta corona no es mía, es del pueblo, de las comarcas, de la Virgen y de mis dos angelitos que me cuidan desde el cielo”, expresó Shiara, visiblemente emocionada tras recibir la banda y la corona.
Shiara Ruiz, nueva Reina de las Fiestas Tradicionales 2025
Durante su participación se destacó como una promotora activa del arte local, de la música y de los valores tradicionales que definen la identidad chontaleña. Shiara representa la fuerza de una juventud que honra su pasado mientras construye el futuro con responsabilidad y orgullo.
La nueva reina será embajadora oficial en todas las actividades religiosas, culturales y festivas durante el mes de agosto, mes en que Juigalpa honra con devoción a su patrona, la Virgen de la Asunción.
El Comité de Fiestas Tradicionales expresó su agradecimiento a las tres candidatas por su entrega y al pueblo por participar de forma activa, ordenada y entusiasta en este evento que enaltece nuestras raíces.
¡Felicidades, Shiara! Tu reinado comienza con fuerza, amor por tu tierra y el respaldo de un pueblo que te reconoce como el rostro joven de su tradición.
