Nuevo terremoto en Kamchatka, Rusia, el más potente registrado en el mundo

Foto: Kamchatka en Crisis Sísmica /cortesía
Foto: Kamchatka en Crisis Sísmica /cortesía

La remota península de Kamchatka, situada en el extremo oriental de Rusia, continuó este jueves bajo constantes sacudidas sísmicas tras el potente terremoto de magnitud 8,8 que sacudió la región el día anterior.

Este sismo, registrado a una profundidad de 20,7 kilómetros, desencadenó al menos ocho réplicas en apenas una hora, con intensidades que oscilaron entre 4,5 y 6,7 grados; según informó el Servicio Geofísico Unificado de Rusia a través de su canal oficial de Telegram.

Pese a la fuerza del movimiento, las autoridades no emitieron alertas de tsunami esta vez. No obstante, durante el sismo principal sí se activaron advertencias por olas peligrosas en varias zonas del Pacífico; incluyendo Japón, Hawái, la costa oeste de Estados Unidos y partes de América Latina.

En cuanto al impacto ambiental, expertos como Román Pukálov, responsable de protección ambiental de Patrulla Verde; señalaron que “no se observan consecuencias significativas. Sólo algunos leones marinos fueron afectados por la caída de rocas. Lo crucial es que no hubo daños en las centrales nucleares japonesas”.

Foto: Kamchatka en Crisis Sísmica /cortesía
Foto: Kamchatka en Crisis Sísmica /cortesía

Kamchatka, Rusia, en crisis sísmica

Kamchatka es conocida por su intensa actividad geológica, concentrando numerosos volcanes activos que representan una amenaza constante para la navegación aérea debido a las columnas de ceniza volcánica.

Tras el terremoto, el volcán Klyuchevsky, uno de los más grandes y activos de Eurasia, entró en erupción. Se reportaron flujos de lava descendiendo por su flanco occidental, junto a resplandores y explosiones que elevaron la alerta regional.

Esta erupción no fue inesperada, pues en semanas previas el observatorio KVERT había detectado un aumento térmico en el volcán mediante imágenes satelitales. Entre el 11 y 17 de julio se mantuvo una alerta naranja por actividad volcánica elevada.

El terremoto se originó en una zona de subducción, donde la placa tectónica del Pacífico se desliza bajo la placa de América del Norte, fenómeno que suele producir sismos de gran magnitud.

TeleSur