Después de casi nueve años de relación y seis años de compromiso, Katy Perry y Orlando Bloom confirmaron recientemente su ruptura.
Sin embargo, la ex pareja fue vista nuevamente junta en Capri, Italia, lo que despertó rumores sobre una posible reconciliación. No obstante, su reencuentro tuvo un motivo muy distinto: su hija, Daisy Dove, de cuatro años.
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Ambos fueron fotografiados disfrutando de un día en el lujoso yate de Jeff Bezos, acompañados por la recién casada Lauren Sánchez, íntima amiga de Perry.
Más tarde, Katy Perry y Orlando Bloom bajaron del yate para recorrer las pintorescas calles de Capri; donde se les vio compartiendo un helado con Daisy, en una imagen que refleja una copaternidad saludable y comprometida.
Katy Perry y Orlando Bloom
Según Vanity Fair, la principal razón del encuentro fue asegurar una convivencia familiar estable para su hija. “Deseamos seguir viéndonos como familia”; afirmaron en un comunicado conjunto, destacando que su prioridad será “criar a Daisy con amor, estabilidad y respeto mutuo”.
En una declaración enviada a Page Six, los representantes confirmaron que Katy y Orlando han estado redefiniendo su relación tras “meses de distancia”; centrándose exclusivamente en la crianza compartida.
Aunque su historia comenzó en 2016 y se consolidó con un compromiso en 2019, su relación ha estado llena de altibajos, incluyendo una breve ruptura en 2017.
Actualmente, Katy Perry se encuentra enfocada en su gira Lifetimes, mientras que Orlando Bloom ha compartido reflexiones introspectivas en redes, citando a Carl Jung sobre el equilibrio emocional.
Más que una reconciliación, el encuentro en Capri deja claro que la prioridad de ambos es construir un entorno amoroso para su hija.
